
La relajación muscular progresiva o profunda es el complemento de la respiración. En este caso, tratamos de liberar la tensión de los músculos, aunque se comienza por tensarlos un poco primero.
La técnica se realiza de la siguiente manera:
- Nos colocamos en una posición cómoda, acostados o sentados.
- Apretamos o tensamos los músculos de la cara, manteniendo dicha tensión por unos segundos (5-10).
- Luego relajamos por un lapso mayor (20-30 segundos).
- Se repite con los mismos músculos 2 veces.
- Luego pasamos a otros grupos: cuello, hombros, espalda, brazos, etc
Gracias.
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